La ciudad de San Salvador de Jujuy ha dado un paso significativo hacia la restauración de su bosque nativo con el inicio de la primera etapa de un emocionante proyecto piloto en el sector de la Ribera Arroyo Las Martas de Alto Comedero. Este ambicioso esfuerzo es llevado a cabo en colaboración entre la Municipalidad de San Salvador de Jujuy, la Universidad, el CONICET e INECOA, y la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Jujuy.
En el Parque Belgrano de Alto Comedero, la secretaria de Planificación y Ambiente de San Salvador de Jujuy, Adriana Diaz, destacó la importancia de esta labor conjunta, “estamos comenzando una primera restauración aquí en el Bosque Ripario del Arroyo Las Martas. Es un trabajo que venimos realizando el municipio a través de las Coordinaciones de Cambio Climático y de Estrategias Ambientales de la Secretaría conjuntamente con la universidad, con CONICET e INECOA, también la facultad, por supuesto, de la Universidad Nacional de Jujuy”.
La restauración del bosque ripario no solo busca recuperar la biodiversidad local, sino que también tiene un impacto positivo en la mitigación del cambio climático. Diaz explicó, “todo esto sirve, primero, para trabajar este corredor biológico, luego para la captación de dióxido de carbono. Tenemos la posibilidad, al restaurar las riberas, de que cuando haya inundaciones esto permita contener y también, por qué no, captar agua para evitar la problemática que luego tienen todos los pobladores de Palpalá.”
En esta primera etapa, se han plantado 60 especies típicas del sector, como la tipa blanca, tipa colorada, tarco y sauce criollo, en un área de mil metros cuadrados. Sin embargo, la restauración no se detiene aquí “en este momento, hablamos de mil metros cuadrados, pero estamos ya terminando de coordinar con Holcim para que, a mediados de noviembre, hacer una plantación de aproximadamente mil trescientas especies más y vamos a tener un total de tres hectáreas trabajadas.”
Marcos Vaira, investigador de CONICET y a cargo del proyecto Impactar, afirmó que esta iniciativa es parte de un proyecto más amplio: “esta es una parte del proyecto que les mencionaba, que es un abordaje piloto. Es la primera etapa en donde nosotros lo primero que hicimos fue evaluar en sitios en donde están en buen estado de conservación el tipo de especies y la distribución que tienen y con eso hemos intentado, en esta primera etapa, hacer una replicación de eso.”
Y en este sentido Vaira comentó que la restauración del bosque ripario no solo tiene beneficios ambientales, sino que también promueve la educación ambiental y la conciencia sobre la importancia de la restauración de áreas degradadas. La elección del Parque Belgrano como sitio de restauración busca involucrar a la población en este proceso y destacar los valores de la implantación de bosques nativos.
Nota audiovisual: https://youtu.be/-TihS6n0M1I