La secretaría de Desarrollo Humano de la Municipalidad de San Salvador de Jujuy, a través de la dirección de Niñez y Adolescencia, llevó adelante una campaña de concientización para la erradicación del bullying junto a los adolescentes que realizaron la pasarela de la Cena Blanca.
Al respecto, el secretario de Desarrollo Humano, Rodrigo Altea, resumió las campañas en las que se viene trabajando en eventos masivos, como la Cena Blanca o la Fiesta de los Estudiantes, “tras la apertura a algunos eventos nos hemos juntado con el Ente Autárquico Permanente y se nos abrió la oportunidad de trabajar con los chicos, adolescentes de 3°, 4° o 5° año, con este objetivo común que tenemos con el Gobierno de la Provincia que es erradicar el bullying, y concientizar a los chicos sobre lo pernicioso que puede ser para la salud mental; así que aprovechamos siempre estos espacios para tener a la Municipalidad presente y promoviendo derechos”.
La directora de Niñez y Adolescencia, Fernanda Altea, explicó, “en esta ocasión nos convoca a todos los jujeños históricamente, estamos con la agenda 2021 y 2022 para erradicar el bullying de los espacios escolares, comunitarios y sociales porque entendemos que el maltrato y el bullying en niños y adolescentes puede perjudicar muchísimo su salud bio-psico-social, por eso queremos intervenir para que niños y jóvenes puedan tener un presente de mayor respeto y consideración a las diferencias, y sobre todo para que puedan construir un futuro y ser partícipes de las construcciones de políticas públicas”.
Estas campañas cuentan con todo un equipo profesional integrado por trabajadores sociales, psicólogos y otros especialistas que desarrollan talleres activos con alumnos de los niveles primario y secundario en los que se hace un acompañamiento para que niños y jóvenes puedan expresar sus conocimientos sobre el bullying y aportar propuestas para la erradicación. Los profesionales destacaron la excelente recepción, participación y compromiso de parte de los alumnos que ven con preocupación las situaciones de tristeza y aislamiento que son solo dos de las consecuencias de este flagelo. Para niños y jóvenes resulta fundamental la existencia de espacios de libre expresión donde haya adultos dispuestos a escuchar y actuar.